OCARU
ENTRE LA INVISIBILIZACIÓN Y PRECARIZACIÓN: ANÁLISIS DE LA DIVISIÓN SEXUAL DEL TRABAJO
Kruskaya Hidalgo y María Belén Valencia presentaron una investigación sobre las multinacionales UberEats y Glovo, plataformas que muestran datos de precarización y explotación laboral, en las que participan personas con más necesidades laborales y mayor vulnerabilidad, es decir, venezolanas, venezolanos y jóvenes en su mayoría entre 24 y 32 años.
Al ser plataformas cuya herramienta de trabajo es la bicicleta y la motocicleta, socialmente son considerados “trabajos para hombres”, de allí la masculinización de la plataforma.
Tanto el carácter de nacionalidad y sexo que incurre en el manejo de las plataformas muestran la necesidad de una investigación interseccional con enfoque de género, afirma Kruskaya, pues “no puede existir una academia, una investigación sin una posición política”.
En cuanto a la división sexual del trabajo, María Belén menciona que hay una mínima cantidad de mujeres que trabajan en Ubereats o Glovo, por motivos sexistas acompañados de acoso sexual, acusaciones de “mala madre” hacia las mujeres que trabajan en la entrega de comida en vez de cuidar la casa. Varias de estas afirmaciones vienen de compañeros de trabajo que evidencian el miedo de que las mujeres puedan hacer un “oficio de hombres”.
En cuanto al tiempo libre de las y los trabajadores, se muestra que los hombres, después de las 10 o 12 horas de trabajo, o en días sin trabajo, se dedican al ocio, al juego o el descanso, mientras que las mujeres, después de las largas horas de trabajo y en sus días libres, se dedican a las tareas de cuidado del hogar y de la vida.
La investigación muestra, a través de un mapeo etnográfico, que esta plataforma multinacional trabaja con sectores de clase media y alta, cuyos pedidos son hacia restaurantes como McDonald’s, Burger King y KFC, es decir, la nuevas formas de trabajo empleadas por UberEats y Glovo, no solo aumenta y contribuye con la explotación laboral, la precarización y el sexismo del oficio, también evidencia que aportan y contribuyen con la acumulación de transnacionales alimenticias como las mencionadas.
SUMISAS, PRECARIZADAS Y ENDEUDADAS: EL REGRESO DEL AJUSTE ESTRUCTURAL
En una segunda ponencia del evento, Nora Fernandez aclara que parten del marxismo y el feminismo para analizar al Fondo Monetario Internacional (FMI) y su anclaje al neoliberalismo, definiéndolo como –conjunto teórico de prácticas y políticas economías- cuyo objetivo es reestablecer el poder económico de las élites a nivel global. Nora ubica a un “Homo económico” como el agente de dichas políticas, el cual debe ser entendido en su contexto, su género, objetivos y ambiciones.
Pensar al FMI desde el marxismo y el feminismo permite concebir los efectos de dicho agente en las mujeres, pues el enfoque economicista del FMI propone un feminismo individualista e impulsa a las mujeres a ser emprendedoras y a trabajar por sus intereses individuales, independientemente de sus condiciones de vida y trabajo, anulando, así, las diferencias de clases y sus luchas.
La Carta de Intención del FMI propone flexibilización laboral, condición que afectaría principalmente a mujeres, pues se asume que no necesitan un trabajo fijo, pues entre sus deberes de maternidad, cuidado de la vida y el hogar, lo que necesitan es flexibilidad laboral.
Alejandra Santillana menciona que el gobierno intenta construir una única opción –la austeridad-, muestra además que el decreto 883 no solo viola la Constitución, sino también viola un principio básico de transparencia, pues, una vez más, el Estado neoliberal toma decisiones sin que los y las ecuatorianas sepamos qué se está firmando.
La investigadora, reafirma las condiciones de precarización y sobreexplotación como consecuencia de la aprobación de un decreto firmado con el FMI, a través de 3 cambios: la reforma laboral; la flexibilidad laboral; y los despidos (masivos?) en varios sectores. Las nuevas formas de trabajo afectarían directamente al pueblo ecuatoriano. La deuda con el FMI no sería una deuda del Estado, sino una deuda del pueblo.
Si en una situación de crisis, explotación y desempleo, son las mujeres las más afectadas y violentadas en múltiples sentidos, ¿cómo un tratado en el que las condiciones son más precarizadas las mujeres tendrían beneficios?
VISIÓN DE GÉNERO DE LAS INSTITUCIONES MULTILATERALES
Para finalizar la jornada, Magdalena León aporta al tema del neoliberalismo y su relación con las mujeres, explicando que históricamente ha habido fases que muestran una feminización de la pobreza, pues ajustes como los del FMI golpean más fuerte a las mujeres.
Este tipo de políticas no reconocen otro tipo de economía y generación de bienes y servicios para el sustento básico de la vida, pues son las pequeñas y subsumidas economías las que alimentan al país, forman redes y sistemas, además que aportan sustantivamente a la economía de la sociedad, planteando alternativas de integración y comercio a partir de la experiencia.