En boletines previos se expuso la asimetría entre el costo de la canasta básica, la inflación y los ingresos de lxs ecuatorianxs. Tal como el empleo pleno alcanza a 1 de cada 3 personas en el país, la inseguridad alimentaria también. Es más, en 2022, la inseguridad alimentaria fue más alta que durante el año de la pandemia, año en el que este indicador creció en más de 4 puntos porcentuales (ver Figura 1). Esto no es nada nuevo, y responde a una tendencia desde el 2015, en menos de una década pasamos de tener a 1 de cada 5 personas con dificultades al acceso de alimentos a 1 de cada 3. Y en el caso de la inseguridad alimentaria grave[1], la situación es peor con la duplicación del porcentaje de población que se encuentra en esta situación. La subalimentación también se incrementó en los últimos años, y esta hace referencia a un mayor número de personas que no pueden cubrir sus requerimientos energéticos para tener una vida activa.
Las restricciones en el acceso al alimento tienen muchas asimetrías en su interior, una de ellas se refiere al sexo de las personas. En el país, a nivel de adultos, las mujeres son quienes más están expuestas a la inseguridad alimentaria grave o moderada (ver Figura 2). Entre 2015 y 2022, el número de hombres en inseguridad alimentaria pasó de 1.1 a 2.2 millones, en el mismo periodo, el número de mujeres pasó de 1.3 millones a 2.7 millones (FAO 2024b). En términos de inseguridad alimentaria grave, la tendencia es la misma. Las mujeres adultas son quienes más están relacionadas a ella. A la tendencia general se le sumó la pandemia, la cual incrementó en casi dos puntos porcentuales a la prevalencia de la inseguridad alimentaria grave, mientras que en los hombres fue medio punto porcentual. Para 2022, 1.7 millones de adultos se encontraban en inseguridad alimentaria grave, de lxs cuales 1 millón fueron mujeres (FAO 2024b).
Garantizar el alimento en los hogares ya es un reto en el Ecuador, abastecerse de una dieta saludable supone aun mayores retos. Al cerrar el 2023, 1 de cada 4 personas tiene 3 dólares para sobrevivir al día, mientras que 1 de cada 10 vive con 1.7 dólares diarios (Dávila 2024). A este escenario hay que sumarle el alza del IVA, y también de los combustibles lo cual afecta directamente a todas las cadenas de suministro.
En 2022, una dieta saludable costaba 3 dólares por día, sin incluir otros costos de vida (vivienda, salud, educación), al menos el 25% de personas no podría acceder a una dieta saludable. Y aunque el aumento entre 2015 y 2022 parezca mínimo en términos relativos, la dieta saludable es un 20% más cara. El costo de la dieta no aumentó en gran proporción con la llegada de la pandemia, pero sí lo hizo el número de personas que podía acceder a ella. Cerca de 1 millón de personas se sumaron al grupo que no podía acceder a una dieta saludable entre 2019 y 2020 (ver Figura 3). Pese a que la situación ha mejorado, comparado con el periodo prepandemia, 400 mil personas no pudieron volver a consumir una dieta saludable.
A manera de conclusión
El acceso a alimentos es cada vez más restringido en Ecuador, la tendencia prepandemia ya era negativa. Las cifras muestran cierta recuperación, sin embargo, la situación actual en torno al empleo muestra que el acceso a alimentos y a una dieta balanceada cada vez está más asociada al escalafón de ingresos de las personas. La producción de alimentos en Ecuador no ha parado, y pese que la agroindustria y la agroexportación[2] ganan terreno de manera acelerada, existe un grupo de productorxs que aun apuestan a la producción de alimentos pese a los bajos precios, falta de incentivos[3] y las brechas de intermediación crecientes[4]. Y es este el grupo con el que se deben crear canales y alternativas para que los alimentos lleguen a ser distribuidos a la población a precios justos y producidos sanamente.
Te podría interesar
Lanzamiento de libro. Agriculturas Familiares Campesinas en los Andes: entre las múltiples crisis y la transformación
Edición genética en semillas: ¿Avance tecnológico o amenaza para la soberanía alimentaria en Ecuador?
¿Apuntar al ganado para resolver el problema climático? Aportes al debate de la producción ganadera
Agroecología y Agriculturas Familiares Campesinas en México, Ecuador, Perú y España
Notas:
[1] La inseguridad alimentaria ocurre cuando al menos una persona de un hogar no ha comido durante un día completo. El caso también se da cuando, durante varias veces al año, una persona fue forzada a reducir la cantidad de comida, saltarse comidas o irse con hambre por falta de dinero u otros recursos. Por otra parte la inseguridad alimentaria moderada está más asociada con reducir la calidad y en ocasiones la cantidad de la comida (FAO 2023).
[2] Revisar: Hablemos de concentración: La tierra para pocas manos – Ocaru
[3] Revisar: El crédito agropecuario: ¿Para quién y para qué? – Ocaru
[4] Revisar: Los precios agropecuarios: elementos que precarizan la vida en el campo (I) – Ocaru
Bibliografía:
Dávila, Diana. 2024. “¿Sobrevivir con menos de USD 3 diarios? El drama de las familias en el último año.” Radio Pichincha. ht- tps://www.radiopichincha.com/pobre- za-desempleo-ecuador-familias-sobrevi- vir-daniel-noboa/.
FAO. 2023. “Definiciones y estándares – Datos de Seguridad Alimentaria.” FAO. https:// www.fao.org/faostat/es/#data/FS.
FAO. 2024a. Costo y asequilibilidad de una die- ta saludable (CoAHD). edited by FAOSTAT. Roma: Organización de las Naciones Uni- das para la Alimentación y la Agricultura.
FAO. 2024b. Datos de Seguridad Alimentaria. edited by Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricul- tura. Roma.
Compartir este artículo
David Singaña Tapia
Investigador del OCARUIngeniero en Ciencias Económicas, Master en Desarrollo Territorial Rural, realiza sus estudios de doctorado en la Universidad Justus Liebig – Giessen, Alemania.
Integra el grupo HINASES (Human-nature Interactions in Agricultural Socio-Ecological Systems).
Líneas de investigación y publicación: Soberanía Alimentaria, Agricultura Familiar y Acuerdos Comerciales.










